Ausente

Sostengo un vértigo sordo cansado de la añoranza, camino entre los colores que dañan mis tonos grises, sin brújulas que señalen hacia el norte de tus piernas, sin vehículos que alcancen al tren de amor que perdí... Cavan deseos las estrellas en mi cabeza agachada, tú, a miles de sentimientos, sonríes hasta quedar dormida, contando likes de tus fotos antes de entregarte a la almohada mientras yo cuento las gotas de lágrimas derramadas en este suelo sin ti... No todos tienen sonrisas guardadas dentro de un móvil, no todos se olvidan en breve de una herida tan larga, algunos le llaman piedras a los obstáculos del camino, para otros ya es común en sus días encontrarlas... ¿Qué haremos cuando pregunten por nosotros nuestras sábanas, tu vendrás, yo iré, contarás todo o no dirás nada? ¿Qué haremos cuando las luces dejen de estar apagadas, gritarás sorpresa a viva voz, o no habrá nadie en la sala? Solo aquel viejo futuro que olvidaste en el sofá, empolvado como el mito que el amor es para siempre, inservible en el presente en que tú ya no estás, y en el que yo, aunque esté, me sigo sintiendo ausente... Me he sentado a descansar porque los pies ya me duelen, y porque dar vueltas en círculos me ha terminado mareando, gobernaré aquí mientras tanto, en este trozo de calle vacía, en este terreno baldío que está muy lejos de ser un bonito lugar para construir la casa que un día, entre risas, soñamos...

Mr. Yovo