«Cuando la Vigilante del Mar deja de llorar», prosa poética de Patri Couto
Cuando la Vigilante del Mar deja de llorar Todos los días la Vigilante del Mar del Sur derramaba cinco gotas de lágrimas al agua que se...
𝗟𝗮 𝗲𝘁𝗲𝗿𝗻𝗶𝗱𝗮𝗱
Corteza del árbol de la noche, cuchillos nacidos del moho
te susurran los nombres, el tiempo y los corazones.
Una palabra que dormía cuando la oímos
se desliza bajo la fronda:
elocuente será el otoño, más elocuente la mano que lo recoja,
fresca como la amapola del olvido la boca que la besa.
Paul Celan